RE-Manifiesto

Hola de nuevo, amigos de la comida chunga.

Como habréis podido notar, las actualizaciones de este blog son más bien nulas, ya que por circunstancias de la vida, he podido dedicarme más o menos a cocinar de una forma semi-pro (incluso a veces pro), y apenas he tenido la oportunidad de seguir castigando mi alma con basura precocinada, o si lo hacía era basura precocinada tan aceptable que no tenía mucha gracia compartirlo.

Como hoy he descubierto que odio profundamente a la gente que odia comer (o mejor dicho, que comen sólo para sobrevivir), por el momento voy a dedicar el resto de este blog a cosas que me llamen la atención en relación con la comida, y precisamente hoy -y probablemente durante los próximos meses) os traigo un caso de estudio:

Por circunstancias de la vida estoy compartiendo piso con una persona que se dedica a alimentarse de una forma bastante absurda y anodina, y lo que se me ha ocurrido es compartir sus hábitos alimenticios (si bien esta persona no lo sabe) con todos vosotros. Realmente es un caso de estudio, y analizando lo que hace como una receta, incluso arriesgando mi vida para probar las sobras de lo que cocine (voy a tener que ir al psicólogo para que me mire lo del tema de autolesionarme), voy a compartir esta experiencia con todos vosotros.

Internet: aquí empieza la segunda temporada de Comida Trainee.